viernes, noviembre 18, 2011

La revolución de la lluvia

(Mi teclado tiene malo el tilde, asi que ojo, mis disculpas).

Son los sentidos que se destapan
Cuando las cosas suenan bien agudo
Como el tacto entre pieles, como entre sorpresas
De sentir al mundo mas unido al alma
Y dejar el aura esparcirse entre los cosmos

Esa vida que fluye y vuela
Unirá a pueblos y religiones
Destapara el rostro de las futuras rebeliones
Para hermanar al hombre con el hombre
Y a la mujer con la mujer

Esa bandera que no necesita banderas
Esa patria teñida verde
De verde esperanza, verde de unión
Verdades verdes volando vertientes
Solo para ver el nuevo amanecer

Esos sentidos intactos, esa lluvia esporádica
Ese infierno que pronto caducara

Todos tenemos en el pecho un corazón
-Así lo dijo Bob-
Esa será la solución.

Nakzo.

miércoles, agosto 17, 2011

Sin sentimientos.

Sexo entre sapiens no termina sin saber nada
Que las personas obvian el sentimiento mutuo
Mueren perdiendo la fe en el amor
Viviendo una mentira de sudor y besos
¡Qué besos! Caricias, toques y pretensiones
Guardando los recuerdos y las intenciones pasadas
Esas intenciones que no guardaban rencores
Más bien
Mostraban intenciones ocultas, mal ajenas de su bien estar

Cuándo es que te vas a fundir conmigo
Olvidando todo aquel ejercicio que implique pensar demasiado
Sabiendo todo lo que hemos pasado y dónde estamos
Y por qué estamos donde estamos
Calla tu orgullo y dame un beso
Sin pensar cuantos peros saldrán a la lucha
Ya que el momento dura el momento
Y tal cual eclipse, el momento ha de ser apreciado con plenitud

Termina con esa carrera de burlas y bromas
Sirviendo a pies descalzo la ironía insensata
Que los besos pasados pasarán pesando tu conciencia
Y la vida espera con los brazos limpios
A tu revolución.

Nakzo.

domingo, mayo 22, 2011

El falso letargo de la rutina

Cosechar esos viejos recuerdos es difícil
Contar tantos cuentos e historias que a cada uno han de olvidar
No es fácil terminar de acuñar cada fotografía del pasado
Ni mucho menos despreciar la verdad
El mundo vuelve a mirar por debajo de la mesa
Y siente en su mirada el tibio humor que se evapora
Porque estos días han sido tal cual he visto en tus besos
En cada momento de subidas y bajadas
Con cada cola quemando neuronas
Y con cada vaso ahogando las penas

El cielo se abre tal cual capullo al sol
Que de manera exacta, sin peros ni porqués
Retracta los dichos que sonaron en la radio alguna tarde de otoño
Ruidos que suspendían los problemas en el cielo
Ruidos que no esperaban respuestas, ni escupían preguntas
Y puesto que el silencio acompañó a cada testigo
Ese ruido se hizo parte de nosotros
Y terminó siendo nuestra pequeña catarsis.

Gritos y besos, insultos y abrazos
Cada cuál para cada quién
Esos colores son los que una vez pinté en las paredes de mi vida
Desteñidos con el paso de los años, he aquí yo en pie frente a ellos
Con brocha y rodillo en las manos
Porque poco a poco se escucha llegar la revolución
Y con ésta, mis paredes volverán a brillar como ayer.

Nakzo.

viernes, noviembre 05, 2010

Horas y risas.

Horas que escriben y describen y viven y sienten y queman y escupen y velan y pasan y pesan durante el resto de mi vida.
Vida, vida misma, vida aquella que destella.
Responsable de sentir, de creer y pensar.
De volar y follar, de temer y querer.
Ver o entender.
De costado, tirado, arruinado.

¿Quien eres tú?
No eres.
No crees.
No mueres.

Dime, al fin.
Pretendo encontrarte en el desván de mis memorias.
El pedazo de tristeza que plantaste entre mis huesos.
Esas vibras de almidón, ese cálido vapor.
Volver a vivir calma y calla sollozos que existieron y habitan en lo más profundo de mi pena.
Es respirar, correr y alucinar dentro de uno mismo.
De entenderse y realizarse.
De sentirse amplio de horizontes, sin metas ni destinos.
Es vivir libre, tranquilo y adelante.
De escuchar, entender y aprender.

De ver.

Mientras todos ríen.
Ergo.
Corren horas y horas.
Locas horas.

Nakzo

viernes, septiembre 17, 2010

Renacer

Hoy he querido volver a escribir
Volver a insultar a aquellos nobles posados en las letras
Caballeros de la sierra blanca, que con su pluma esparcen palabras
Como conciencia envían los pobres
Como dinero escupe el dueño

He querido volver a escribir pues
Aunque cueste
Porque los gritos plasmados suenan más que cincuenta coros
Escribo porque en el corazón del hombre
Faltan plumas y tinteros
Porque mis sollozos mueren con el viento
Y quien los encuentre flotando
Comprenda y viva lo que yo siento

He vuelto a escribir porque me ha faltado vida
Me ha faltado tino y congruencia
Razón, impulso y conciencia
Porque necesito del empuje en si mismo
Y sentir en mis propias palabras
Que el alma vuelve a mi cuerpo
Para renacer de mis cenizas.

Nakzo.

Memorias de un viejo hombre

Meses atrás caían uvas desde el viejo ermitaño
Con su gran bastón fanfarroneaba sobre la juventud
Recordaba sus tiempos de antaño
Esos días donde el viejo gozaba de buena salud
Y de buen humor
Poco a poco el anciano lagrimeaba aquellos sutiles momentos de saber
Esas veces que tuvo que caer,
Aprehender
Recorrer
Y valorar ciertas cosas que con el mismo tiempo
Fueron perdiendo su valor.

Años y años acompañaron a aquel hombre,
Tantas calles recorría, tantas noches, tantos días
Lugares destellados, ciudades sin nombre
A veces él iba, se quedaba, volvía
Siempre supo el rumbo de su vida
Y nunca supo el camino correcto
Pero un día su mano, en Excálibur se posó
Y la mirada de un joven de pronto fue otra cosa
Algo intuía la verdad de sus rituales
Y de un salto, nado y poza
El ermitaño encontró la respuesta

Cada día de mi vida ha valido uno y mil centavos
Y por este mismo precio he de vender mi alma
Que mi vida ha de valer menos que mil fortunas
Pero conocer el amor, créanme, es impagable.

Nakzo.

domingo, junio 13, 2010

A veces, preciso

A veces, quien quiera decirlo
Es preciso sentirse humano ante todo
Ante la vida, ante uno mismo
¿Quién quisiera cortar rosas por los veranos?
Dejarse aquel tiempo para reflejarse en la mirada reciproca
Sonreírle al extraño, abrazar al amigo

Cuanto tiempo nos quita de vida la vida misma
Como un acto suicida, de propio dolor
¿Cuántas horas la monotonía arbitra los partidos que jugamos?
¿Cuántos besos son los que verdaderamente damos?
Esto ha de terminar pronto
Lejano al futuro, cercano al ahora
La brecha entre la maquina y el amor es precisa y fina y delgada como el iris
Discreta, usada, herida en si misma

Tiempo es hoy, cuando la vida que está con nosotros ha de ser visitada
Tiempo es ahora, cuando los ojos abrimos en forma de catarsis
Y poco a poquito, el respiro fresco de aquellos viejos andares
Soplan hacia nuestro adentro, rellenando aquel espacio que tanto tiempo vacio estuvo
Que nos revivirá tal cual Ave Fénix
Y dejará el paso libre para poder decir
“Hoy he aprendido a vivir”.

Nakzo

martes, mayo 04, 2010

Del tino a la incongruencia

Pasión escrita, pasión resuelta
Pasión de tantas vueltas
Corre, corre pequeña princesa
Ahógate en el viento
Y procura olvidar la pereza
Sufre, siente, vive, sueña
Repasa cada fragmento de la historia de este globo
Salpica ternura en los ojos de cada mendigo
Y respira ese aroma de desdicha y pudor
Escribo este dilema en manía de incoherencia
Explico cada problema como corriente de mi conciencia
Si te carece de sentido, bienvenido seas a la utopía
Aquí duermo y estudio y vivo mi melancolía
Corrompe ese tierno golpe
Y rompe el golpe de los desvalidos
Sueña con esa tierra inventada
Lucha como si fuera tu alma la que pusieron en juego
Nunca olvides que el cómo ya existe
Y que todos los peores peros que antes crearon
Han muerto con la revolución.

Nakzo

Tic Tac

El tiempo es tiempo cuando nos miramos
Y cuando no, ¿qué es el tiempo?
Estático, monótono, esférico
Es el callado sonido que no existe
De vez en cuando, cuando no te veo
Cuando no te aprecio y cuando no te creo

El tiempo vive para olvidar condenas
Y está presente en tantas penas
Corre rápido, tal cual caracol
Ligero en su paso, nos mira de reojo
Modifica la vida a su antojo
Aquel que vive de nuestra desdicha
La vida apresura con gran desmesura

Cuando el placer y la gracia abundan el cosmos
Nos deja atrás y mira con recelo
Cuando el blanco acecha nuestra morada
Donde la cobardía ataca al más frívolo bastardo
Ahí está el, agudizando cada centavo de dolor
Quien habla del peso del tiempo
Ha atinado en lo cierto
Porque el tiempo pasa pesado
Y arrastra con él, su preciado botín

Nakzo